Agustín Pardo

AGUSTIN  PARDO  VILLODRE

Enamorado de los espacios abiertos, de los tranquilos pueblos en los que las horas discurren plácidamente, Pardo Villodre se convierte en cantor bucólica de estos temas. La vida campesina es reflejada en todos los aspectos, desde las duras tareas del campo, con el sol agobiante convirtiendo en realidad el refrán de ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta la descripción de la naturaleza cuando los elementos se desatan. Bajos cielos plúmbeos, de densas y pesadas nubes, los pastores recogen su ganado, los campesinos regresan a sus hogares.

Obras bien realizadas, dibujadas de manera precisa y enriquecidas por el color, prestando especial atención a la luz. Siempre ceñido a la realidad, le es suficiente a Pardo Villodre para transmitir sus sentimientos ante la naturaleza, ante la vida alejada de las grandes ciudades.

 J. Llop S. 

Agustín Pardo se adscribe a un impresionismo de cuidada realización; se deja llevar a veces por el sentido del color, por el impacto que el juego de luces y sombras causa en él, pero inmediatamente reconduce a su obra hacia la atención por el detalle, sin caer en realismos excesivos, conservando así sus telas una impronta de naturalidad.Pintura realizada sobre la base de un excelente dibujo, ajustada a la luz y al color, con la que Pardo consigue su objetivo de dejar constancias de una realidad que sabe trasladar al lienzo.

E. Bofill